Los abogados de delito (conocidos también como abogados de defensa penal) defienden a las personas acusadas de cometer un delito. Estos abogados realizan investigaciones, analizan casos y presentan sus conclusiones ante el tribunal en un esfuerzo por obtener la libertad del acusado o negociar un acuerdo o acuerdo de culpabilidad. Los abogados de defensa penal representan a clientes u organizaciones que han sido acusados de mala conducta criminal. Los abogados de defensa penal empleados por el gobierno son conocidos como defensores públicos.
Un abogado de defensa criminal investiga, prepara y argumenta un caso en nombre de un cliente para defenderlo de los cargos penales. Al igual que todos los abogados, deben obtener una licenciatura, luego completar tres años de la escuela de leyes, especializándose en defensa criminal, antes de tomar el examen de su estado. El trabajo de un abogado de defensa penal puede pagar bien y puede ser prestigioso, pero la tarea a menudo es estresante y las horas pueden irregulares y largas.
Un abogado de delito debe mantenerse en contacto constante con el cliente para explicar cualquiera novedad en el caso y para mantenerlo informado sobre el mismo. El abogado debe asegurarse de que las conversaciones con el cliente se mantengan confidenciales. El abogado también debe asegurarse de que él o ella comunique información sobre el caso al cliente para que él o ella comprenda mejor las posibles consecuencias. Un abogado defensor penal tiene derecho a revisar el caso de la fiscalía antes de presentarlo al jurado. Esto le permite encontrar agujeros en el caso contra el acusado y tratar de encontrar evidencia que pueda refutar el caso del fiscal.
Hay cierta instancia en la que una persona necesita absolutamente contratar a un abogado que también se especialice en la rama de inmigración. Esto es necesario en las ocasiones en que un solicitante de ciudadanía o visa ha sido condenado por un delito en el pasado ya que casi todos los formularios de inmigración preguntan si el solicitante ha sido condenado por un delito.
El solicitante debe revelar todo su historia criminal, incluso para los cargos que fueron eliminados o retirados. Por lo general, no es necesario contratar a un abogado penalista; los abogados de inmigración siempre entienden cómo se superponen las leyes de inmigración y penal. En algunos casos, el ente gubernamental puede solicitar documentación adicional para respaldar el reclamo de un solicitante. Trabajar con un abogado desde el comienzo del proceso puede ayudar a evitar demoras e incluso puede acelerar el proceso.
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